La mamoplastia de reducción de senos es una cirugía estética que se utiliza para reducir el tamaño de los senos, mejorando no sólo la apariencia física del paciente sino también su calidad de vida.

En ocasiones el gran tamaño de los senos puede interferir con la actividad normal de las mujeres causando dolores en cuello y espalda, y dando lugar a malos hábitos posturales. La mamoplastia de reducción modifica el volumen y el tamaño de los senos, con lo que se logra corregir dichas alteraciones.

Dependiendo del tamaño de los senos se pueden utilizar diferentes técnicas: si la hipertrofia mamaria no es muy grande, se pueden utilizar técnicas periareolares que dejan cicatrices imperceptibles. Sin embargo, en las hipertrofias moderadas y severas se utilizan incisiones de mayor tamaño que pueden dejar cicatrices en forma de T invertida, que se extienden desde la areola hasta el surco inframamario, y a lo largo del mismo surco. En ningún caso se afecta la capacidad del seno para una posterior lactancia, y aunque la sensibilidad del pezón puede verse afectada en un principio, suele recuperarse al cabo de unas semanas.